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Foto:
La Jornada
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Ciudad de México.- En pleno Día de las Madres, la esperanza de encontrar respuestas volvió a concentrarse detrás del aeropuerto de Hermosillo, donde el colectivo Madres Buscadoras de Sonora localizó restos humanos en un punto ya marcado por hallazgos: el kilómetro 13.5 de la carretera 100, al norte de la ciudad, el mismo sitio donde el pasado 2 de mayo fueron descubiertas seis osamentas.
Durante la jornada de búsqueda, fueron hallados al menos dos cuerpos en avanzado estado de descomposición. Uno de ellos vestía una sudadera amarilla con el rostro cubierto por una prenda negra y calzaba tenis negros con la inscripción “Max”; el otro portaba pantalón de mezclilla con cinturón negro y unos tenis deportivos en tonos morado, blanco y amarillo, marca Puma.
Cecilia Flores Armenta, fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, encabezó la búsqueda acompañada por el nuevo titular de la Comisión Estatal de Búsqueda, Dante Noel Talavera Niebla, a quien reconoció por su disposición y acompañamiento durante las labores. “Hoy no festejamos, luchamos por traer de vuelta a quienes nos hacen falta en casa”, expresó entre lágrimas, al concluir la jornada.
Para las madres buscadoras, el 10 de mayo se transforma cada año en un recordatorio de ausencia, no de celebración. “Nuestra lucha no es por flores ni regalos, sino por verdad y justicia”, reiteró Flores.
Con este nuevo hallazgo, la zona del kilómetro 13.5 se reafirma como un punto en el mapa de hallazgos. Las madres han insistido en que la tierra no miente, y que ellas seguirán escarbando con las manos y con el alma hasta encontrar a sus hijos desaparecidos.
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